The bad batch (2016): Vacío pedante

The bad batch
La vacía pedantería que profesa la directora Ana Lily Amirpour en cada uno de los minutos que dura The bad batch (2016), es digna de estudio.

Título: The bad batch | Dirección: Ana Lily Amirpour | Guión: Ana Lily Amirpour | Reparto: Suki Waterhouse, Jason Momoa, Giovanni Ribisi, Jim Carrey y Keanu Reeves | Fotografía: Lyle Vincent | Montaje: Alex O’Flinn | Producción: Megan Ellison, Danny Gabai y Sina Sayyah

En un futuro postapocalíptico, una joven mutilada trata de salir adelante en medio de un páramo lleno de caníbales y parias sociales.

La pedantería siempre ha sido habitual en el cine. Muchos directores hacen gala de esta cualidad, tales como Alejandro González Iñarritu o Christopher Nolan, pero eso no es algo necesariamente negativo, ya que siempre es necesario un puntito de prepotencia para que un realizador sea capaz de componer una buena película.

Eso sí, hay un tipo de pedantería vacía que, cuando aparece de vez en cuando, provoca películas tan planas y fallidas como la que nos ocupa en este artículo.

The bad batch

The bad batch (Amor carnal en España, traducción tan lamentable como inexacta) fue estrenada en el Festival de Venecia de 2016, dejando impresiones muy alejadas entre sí. Algunos se atrevieron a catalogarla como «La nueva Mad Max«, otros la atacaron por la indiferencia que provoca su visionado. The bad batch no ha logrado llegar a los cines de todo el mundo (aquí en España llegó a través de Netflix), y con razón.

31 (2016): ¿Para qué necesitamos más?

La directora Ana Lily Amirpour ha hecho una película absolutamente vacía, sin más razón de ser que mostrarnos lo talentosa que es para componer planos bonitos del desierto. Para esta oportunidad terriblemente perdida, Amirpour contó con un reparto de buen nivel, capitaneado por la desconocida Suki Waterhouse y secundado por Jason Momoa, Giovanni Ribisi, Jim Carrey y Keanu Reeves.

El reparto no se puede valorar, ya que ninguno de ellos sabe qué hace allí. Particularmente desubicado está Keanu Reeves, quien interpreta a un personaje caricaturesco, plano y olvidable; es una pena que un actor tan notable como el de John Wick (2014) sea contratado para realizar papeles así.

Keanu Reeves en The bad batch

La estética del film es lo único verdaderamente salvable, ya que las escenas están brillantemente fotografiadas. A pesar de que solo sea fuego de artificio para tapar el bochorno de cada escena, algo es algo.

En definitiva, The bad batch es una oportunidad perdida, una muestra de pedantería vacía y un paso atrás en la corta carrera de Amirpour. Esperemos que en el futuro no cometa errores tan groseros.

 

 

Ferran Alcocer Gómez

Ferran Alcocer Gómez

Cinéfilo incondicional. Nolanista, Zimmerista y purista. 8 años llenos de pasión, amor y respeto hacia el cine. Sé distinguir entre cine y streaming.