Olvidándonos de McNulty

McNulty

Ya hace un tiempo, y por casualidad, empecé a ver una miniserie llamada Appropriate Adult. Desde un inicio captó mi atención ver a McNulty en un serie que no fuera The Wire. Así que, incluso antes de empezar a ver los 2 episodios de 90 minutos, que por cierto,  vi del tirón, hice mis indagaciones.

¿Actores? Muy buenos: Dominic West y Emily Watson. Si de algo iba a estar seguro es de que al menos disfrutaría de sus interpretaciones. ¿Historia? Atractiva. Basada en hechos reales. Siempre me han fascinado y a la vez aborrecido. Supongo que las culpables son esas películas de las 16:00 de Antena 3.

Appropiate Adult 02

Por último, quise saber el significado de Appropriate Adult. Básicamente es un voluntario/asistente social que hace de soporte a los menores de edad o a los adultos con problemas de comprensión, para ayudarles en cualquier tema relacionado con su caso.

Una vez supe lo básico, empecé el visionado sin saber lo que me iba a encontrar, y 3 horas después, me levanté del sofá entusiasmado sin entender cómo no la había podido ver antes, y haciendo de Dominic West mi actor fetiche.

La serie va reconstruyendo el caso de unos de los asesinos más famosos del Reino Unido, Fred West. Y lo hace de una forma mágica, sin mostrar ni un ápice de sangre y jugando con el espectador de principio a fin. Quizás os parezca exagerado, y puede que así lo sea, pero es tal mi emoción que me gustaría que la viera todo el mundo.

Appropriate Adult 03

Durante el transcurso de las tres horas se van alternando la narración real de los crímenes con la versión peculiar del matrimonio West, por lo que recibimos información de ambas partes consiguiendo de esta forma la total implicación de los espectadores.
Mucho hemos hablado de la interpretación de Dominic West, pero no se queda atrás la actriz protagonista, Emily Watson, que consigue, sin que nos demos cuenta, que nos pongamos en su lugar y suframos junto a ella.

Llegados a éste punto, no es de extrañar que arrasara en los premios BAFTA, dejando sin estatuillas al mismísimo Sherlock Holmes, hecho que no hace más que constatar lo que llevo intentando explicar desde la primera palabra que he escrito.

Si has llegado hasta aquí, cosa que no entiendo, tendré que esforzarme más en la siguiente recomendación para que dejes de leer y te pongas delante del ordenador o pantalla de televisión a visionarla.