El hilo invisible (2017): Perversión hitchcockiana

Phantom Thread el hilo invisible
Paul Thomas Anderson es uno de los más grandes directores dentro del panorama cinematográfico norteamericano, y su carrera da buena fe de ello. Protagonizada por el indiscutible Daniel Day-Lewis, llega para conmocionarnos la nueva cinta del talentoso director: El hilo invisible.

Título: El hilo invisible | Dirección: Paul Thomas Anderson  | Reparto: Daniel Day-Lewis, Vicky Krieps y Lesley Manville  Paul Thomas Anderson | Música: Jonny Greenwood 

Años 50, posguerra. Reynolds Woodcook es un prestigioso modista de la alta clase británica y, junto a su inseparable hermana, realiza una rutina casi enfermiza de trabajo que no le permite tener una vida normal. Con el paso de los años, ha ido conociendo distintas musas que le han inspirado para sus nuevos diseños, pero todas tuvieron un fin. Una nueva musa ha aparecido, Alma, y no parece que vaya a ser cómo las demás.

Paul Thomas Anderson es un director francamente talentoso: Todas sus películas son «Arte en movimiento«, ya que compone imágenes de una belleza descomunal, las cuales provocan sentimientos en el espectador que pocos directores pueden producir. Su primera etapa como director fue demasiado magistral: Boogie Nights (1997) y Magnolia (1999) son piezas de culto que se convertirían en clásicos con el paso de los años, sin duda alguna.

Su segunda, y presente, etapa se focaliza más en personajes concretos y no tanto en repartos corales como si hicieron sus dos obras maestras mencionadas anteriormente. Pozos de ambición (2007) o The master (2012) son buena prueba de ello, ya que tratan sobre personajes muy concretos, con sus frustraciones y su psicología como principal tema del film; cierto es que su segunda etapa no es tan brillante como la primera, pero siguen siendo películas muy por encima de la media que requieren varios visionados para poder disfrutarlas plenamente. Con todo este contexto relatado, PTA (Abreviación artística de Paul Thomas Anderson) escribe y dirige su nueva película: El hilo invisible.

EL HILO INVISIBLE
Magistral muestra de buen cine con aromas de Hitchcock y con la sensación de que su director, Paul Thomas Anderson, roza la excelencia en cada película que realiza.

En primer lugar, hay que decir que nos encontramos ante una película muy particular que requiere varios visionados para poder extraer todo el potencial que esconde. A simple vista, puede parecer una película bastante simple, alejándose de la tónica habitual de PTA, en cambio, este es un film que esconde mucho más de lo que enseña, y esas son las películas que más merecen la pena.

La relación entre Woodcook y su nueva musa, Alma, es el tema principal en la obra, mostrando un amor complicado con demasiado odio e insatisfacción por ambas partes, pero si hay una palabra que define mejor que ninguna otra la naturaleza de esta relación es perversión. Woodcook y Alma no se quieren, pero se necesitan, lo que acaba llevando la relación hacia un punto peligroso que acaba ocultando un sentimiento de perversión que hace mella en el espectador, quien visualiza todas las fases que sufren los dos protagonistas para poder estar juntos, pero también puede apreciar lo que no nos enseña la cámara: Una relación real y tóxica.

El hilo invisible es una película imprescindible no solo por su autoría, sino por su protagonista, Daniel Day-Lewis. El actor irlandés es uno de los mejores actores de la historia del cine y, lamentablemente, ha anunciado que esta será su última película; cierto es que no es la primera vez que Day-Lewis anuncia una retirada y al cabo de un tiempo vuelve a hacer una película, pero, en esta ocasión, parece que va en serio.

Reynolds Woodcook es un personaje fascinante, ya no solo por la impresionante actuación de Day-Lewis, sino por la complejidad que esconde: Es un personaje enfermo y roto que solo sigue vivo por su innegable talento para la moda. PTA podría haber hecho una película dedicada al personaje de Woodcook y le habría salido una buena película, pero es la inclusión de Alma lo que hace a la película única. La joven musa de Woodcock (interpretada por la magnética Vicky Krieps) es el contrapunto emocional del protagonista que provoca un verdadero cambio en la personalidad de Woodcook, quien cada vez depende menos de su trabajo para tener una razón para vivir.

Esta complicada relación en El hilo invisible cuenta con un tercer personaje en discordia: La hermana de Woodcook, Cyril. La actriz británica Lesley Manville es, con pocas apariciones, una de las notas más positivas del film, ya que nos encontramos ante un personaje fuerte y pocas veces visto que, además, es imprescindible para la película: No es la típica hermana que pueda resultar tediosa y no añade nada a la historia, sino que sus conversaciones con los dos protagonistas son tan reveladoras que aumentan la complejidad del film hasta hacerlo más interesante y analizable. Sin duda alguna, un trío protagonista de un nivel altísimo, tanto en escritura como en actuación.

 EL HILO INVISIBLE

Respecto a los apartados técnicos, la dirección sigue la tónica habitual de la filmografía del director californiano, convirtiendo cada plano en una obra de arte que bien podrían ser vendidos como cuadros. La fotografía corre a cargo, en esta ocasión, del mismo PTA, dotando a los encuadres e iluminaciones de una elegancia exquisita, muy acorde con las escenas proyectadas.

La banda sonora de El hilo invisible está compuesta por el habitual compositor de PTA: Jonny Greenwood. La suaves melodías que inundan la pantalla en cada aparición (puede que, incluso, de forma demasiado recurrente) no hacen más que apoyar la elegancia producida por la fotografía, ofreciendo temas que pueden parecer clásicos, pero que son completamente originales.

El conjunto técnico derrocha talento y, si a esto le añadimos esta oscura y perversa historia, nos encontramos ante una obra con mucho de Hitchcock, director capital en la historia del cine y uno de los mayores referentes de Paul Thomas Anderson, quien confirma con cada película lo que lleva pensando la comunidad cinefila desde hace ya 20 años: Estamos ante un MAESTRO.

 

 

Ferran Alcocer Gómez

Ferran Alcocer Gómez

Cinéfilo incondicional. Nolanista, Zimmerista y purista. 8 años llenos de pasión, amor y respeto hacia el cine. Sé distinguir entre cine y streaming.