Godzilla: King of the Monsters (2019): Plural interminable

Godzilla: King of the Monsters
[CON SPOILERS] La tercera entrega del monsterverse peca de caer en la intrascendencia que con tanta solvencia lograron driblar sus dos predecesoras. 

Godzilla es uno de los grandes iconos del cine fantástico. Creado en los años 50 por la compañía japonesa Toho, este pionero del cine de monstruos cuenta con más de 30 adaptaciones, tanto japonesas como americanas. Sus adaptaciones hollywoodenses nunca lograron el éxito que sí cosechó en su país natal, pero en 2014 llegó una cinta que rompió la mala racha de Godzilla en suelo americano.

Godzilla (2014), de Gareth Edwards, recibió reacciones divididas por parte del público, pero la crítica tuvo un consenso generalmente positivo. Gran parte de los espectadores criticaron que el mítico personaje tuvo un papel residual en la película, dado que sale en pantalla no más de diez minutos de las dos horas que dura la cinta. Precisamente por eso es una película tan notable: El protagonismo no recae en Godzilla, sino en los personajes humanos que ven cómo sus vidas cambian radicalmente por los actos que se encadenan durante el metraje.

El filme de Edwards supuso el inicio de un nuevo universo cinematográfico: el monsterverse. Este continuaría con Kong: Skull Island (2017), de Jordan Vogt-Roberts, cuyo resultado fue asentar los cimientos del monsterverse. 

Godzilla: King of the Monsters

Nos encontramos en 2019 y la segunda parte de Godzilla y la tercera del monsterverse ha salido a la luz. Godzilla: King of the Monsters (2019), de Michael Dougherty, está llamada a ser uno de los blockbusters del verano. Cuenta con un reparto lleno de caras conocidas (Vera Farmiga, Kyle Chandler, Millie Bobby Brown…) y una premisa más que ilusionante, por lo que no debería ser difícil que repitiera el resultado de sus predecesoras.

Lamentablemente, Godzilla: King of the Monsters repite la soporífera fórmula que utilizaron las decepcionantes Pacific Rim: Uprising (2018), de Steven S. DeKnight, y Sicario: Day of the Soldado (2018), de Stefano Sollima. Es decir, estirar la refrescante excelencia de la primera entrega hasta acabar en la irrelevancia más absoluta. Todos los factores que hicieron de Godzilla una cinta casi perfecta desaparecen aquí.

El gran error de Godzilla: King of the Monsters es dejar todo su atractivo en manos de los monstruos (así, en plural interminable) y dar la espalda a los personajes humanos. Es casi imposible sostener dos horas de peleas entre monstruos. 

Godzilla: King of the Monsters 2

La predictibilidad también es una lacra importante aquí. No hay casi ningún aspecto en el que la película pueda sorprender al espectador, ni siquiera en las múltiples (así, en plural interminable) resurrecciones de Godzilla. Cuando el objetivo de una cinta es cosechar millones en vez de contar una historia, peligro. 

Es especialmente frustrante ver cómo una idea tan potente como el monsterverse ha quedado herida de muerte por la imperiosa necesidad de poner el piloto automático y dejar que Godzilla lo haga todo. Oportunidad perdida, esperemos que Adam Wingard y su Godzilla Vs. Kong (2020) remonte el vuelo. 

Ferran Alcocer Gómez

Ferran Alcocer Gómez

Cinéfilo incondicional. Nolanista, Zimmerista y purista. 8 años llenos de pasión, amor y respeto hacia el cine. Sé distinguir entre cine y streaming.