Crítica de Sabrás que Hacer Conmigo (2016)

Sabrás que hacer conmigo
Sabrás que Hacer Conmigo | Año: 2016| Dirección: Katina Medina Mora | Guión: Emma Bertrán, Samara Ibrahim, Katina Medina Mora | Música: Andrés Sánchez | Fotografía: Erwin Jaquez | Reparto: Ilse Salas, Pablo Deerqui, Rosa María Bianchi, José Ángel Bichir, Mariana Treviño, Mora Ferriol Avails, Arturo Barba, Poncho Borbolla, Rodrigo Franco, Jacobo Lieberman, Eduardo Negrete, Gabriel Nuncio, Natalia Plascencia, Alejandro Reza, Paula Serrano | Productora: Bh5 Group – Detalle Films – Panorama Global | Género: Drama | Duración:  86 min.

Como se agradece encontrar una historia sobre la relación entre un hombre y una mujer sin la necesidad de llenarla de tópicos y clichés y tener que verla junto a un paquete de pañuelos al lado. Es posible hacer buen cine sin necesidad de maquillar la vida real con un final previsible y agradable. Esta situación no es la más adecuada para llenar salas de cines pero el realismo y la cotidianidad es lo que me gusta de esta historia.

Sabrás que Hacer Conmigo nos pone sobre la mesa varias preguntas que cada una resolverá según su visión de la vida.

Sabrás que hacer conmigo
Su primer viaje al mar

Nicolás es un fotógrafo que padece epilepsia y este hecho le ha obligado a llevar una vida más sana y a controlar los excesos que lleven a empeorar la enfermedad. Isabel es una mujer independiente y segura aparentemente, pero lleva una mochila a cuestas que se irá descubriendo poco a poco. Tiene una madre enferma y deprimida por la muerte de un hijo pero Isabel la intenta ayudar una y otra vez. Isabel y Nicolás se enamoran pero tienen que ir sorteando los impedimentos que cada uno lleva en sus almas.

En Sabrás que Hacer Conmigo nos enseñan como los demonios que cada uno de nosotros llevamos en el interior no son impedimento para luchar por superarse y llegar a sentirse cómodo con otra persona. Seguramente sois de los que creéis que hay personas que están condenadas a encontrarse, a quererse o a reconocerse de verdad aceptando las consecuencias. Pues todo esto es lo que le ocurre a la pareja protagonista.

Sabrás que hacer conmigo
No siempre encontrarás a la pareja bien avenida

Sabrás que Hacer Conmigo está protagonizada por Ilse Salas y Pablo Derqui. Los dos actores interpretan a la perfección sus papeles. Ilse os conmoverá ya que la relación que tiene con su madre es más dura por el sufrimiento que lleva dentro. Esto ocurre tras perder a su hijo y olvidándose de que su hija siempre ha estado ahí y no se ha hecho cargo de sus necesidades.

La directora Katina Medina Mora le ha dado el impulso necesario para que los personajes nos resulten creíbles y ha sido capaz de llevar a la gran pantalla una historia complicada pero a la vez accesible al público.

Sabrás que hacer conmigo
Nicolás intenta que a su pareja le guste el buceo

A la directora le gusta contar historias de amor fuera del enfoque tradicional. Desde su película LuTo en la que cuenta la vida de una pareja de novios. Ahora con Sabrás que hacer conmigo nos adentra en otro tipo de relación con un encuentro casual y con personajes llenos de problemas.

La historia se divide en tres secciones, primero nos cuenta como es Isabel, luego Nicolás y finalmente nos cuenta la relación entre ambos.

Sabrás que hacer conmigo
Nicolás padece ataques epilépticos

Con Sabrás que hacer conmigo descubrirás más que una historia de amor. Te invita a reflexionar sobre el compromiso que a veces rehuimos por diferentes causas que además son motivos inventados o imaginados.

Nos encontramos a una pareja que no tira la toalla ante las adversidades aunque esto no les asegure que al final la relación sea lo esperado, nos da esperanza mostrándonos que podemos superar las barreras mentales a las que estamos acostumbrados a ponernos.

Sabrás que hacer conmigo es la demostración de que se puede realizar una buena película utilizando un tema recurrente y manido por la industria cinematográfica pero con mucha sensibilidad para enganchar al espectador sin necesidad de utilizar convencionalismos que nos toquen la fibra sensible y se nos salten las lágrimas a la primera de cambio.