Nombre: Un Hombre de Altura | Dirección: Laurent Tirard | Guión: Laurent Tirard, Grégoire Vigneron |Música : Éric Neveux | Fotografía: Jérôme Alméras | Reparto: Jean Dujardin, Virginie Efira, Cédric Kahn, César Doboy, Myriam Tekaïa, Eléa Clair, Jean-Michel Lahmi, François-Dominique blin, Adonis Danieletto, Lionel Mur | Producción: VVZ Productions, Gaumont, Creative Andina | Género: Romance-Comedia| Duración: 98min
Es lo que ocurre cuando desde la industria cinematográfica te han inculcado con calzador ese amor romántico que constantemente nos han querido vender, sobre todo a las mujeres, con ese tan clásico príncipe azul que nos salvará de no sé qué y no se quién, que seremos felices y comeremos perdices pero que luego no nos cuentan lo que ocurre después de comerse juntos esas perdices.
Pues eso, que esta comedia romántica pone encima de la mesa como los estereotipos físicos marcados por una sociedad patriarcal que subyuga, y no sólo a mujeres. Sería interesante hacer una llamada de atención y avisar que también afecta a los hombres porque el patriarcado no solo quiere someter a las mujeres a sus dictaduras, también obliga a hombres con una exigencias ridículas.
Cuando uno o una encuentra a una persona que la respeta, que le hace reír , la cuida y la valora. ¿Pensáis que tiene algo de malo no cumplir con los cánones de belleza que dicta la sociedad? Si vuestra respuesta es afirmativa, la superficialidad os supura por los poros y no seréis libres hasta que os deis cuenta que el físico cambia muy rápido con el tiempo y luego tendremos que tener algo más para seducir cuando esa belleza exterior empiece a decaer.
En la película que nos ocupa, Diana es una guapa mujer de cuarenta años, divorciada, que trabaja como abogada junto a su ex marido. Estando en un bar en una reunión de negocios con su socio y después de una acalorada discusión con éste, se deja olvidado el móvil y un señor (Alexandre) se hace cargo de él. Se pone en contacto con ella y ahí empieza la historia. La convence para quedar y así poder devolverle el objeto perdido pero se encuentra con una sorpresa, Alexandre (Jean Dujardin, se redujo de forma digital) es muy bajito, mide solo 1.36 centímetros. Él la intenta conquistar porque posee grandes cualidades como gran conversador, amable, inteligente, arquitecto con éxito, un hijo guapísimo y con un gran futuro, una gran casa etc. y ella se deja conquistar.
Es curioso como da a entender el guión que a Diana no le importa la estatura y sí las burlas por parte de amigos y familiares. Creo que debería haberse enfatizado y haberle dado también protagonismo a los sentimiento encontrado de la propia Diana junto con las críticas de las personas ajenas a la relación. No es muy creíble que no haya dudas internas de la protagonista y que solo tambalee su relación las opiniones y comentarios de los demás.
Me quedo con el personaje de la madre de Diana, casada con un señor magnífico pero sordo. La madre aspira a algo más para su hija, alguien sin ninguna «minusvalía». El marido le reprocha que él es sordo y la mujer le responde que eso no se ve. ¿Quién tiene la «minusvalía» aquí?.
Un Hombre de Altura es una adaptación francesa de la película de Marcos Carnevale «Corazón de León» de la que adolece de los mismo defectos que la película en cuestión. Da por hecho que las críticas y la aceptación se superan a base de talonario, aboga por la integración pero en vez de utilizar un actor realmente de la estatura en cuestión retocan digitalmente el cuerpo de un actor de talla normal utilizando además los chiste típicos y crueles para mofarse de todo lo que se sale de la norma.
El guión podía haber aprovechado más los temas que trata para convertirla en una película divertida pero con enseñanza real. Debería haber aprovechado más y mejor a los actores secundarios. Se agradece la química entre los protagonistas, es lo que te hace que sigas viendo Un Hombre de Altura.
La banda sonora de la película me ha resultado muy agradable, para mí de lo mejorcito de Un Hombre de Altura.
La moraleja de la película Un Hombre de Altura es que nos hace ver que el exterior no es tan importante, que lo que cuenta es el interior de las personas, este tema ya es muy recurrente en este tipo de género así que no nos aportará mucho más.
Un Hombre de Altura es una película agradable de ver para un día que no tengas interés en pensar mucho, solo dejarte caer en el sofá y observar lo que pasa por ahí. Te sacará alguna que otra sonrisa pero ya que emplean recursos, esfuerzos y dinero en realizar una película estaría bien que se esforzaran creando un guión más convincente y que enseñara al espectador algo más.
