Whiplash es un film que tiene de protagonista la música jazz. Crítica de Whiplash (2014): Dirigida y guionizada por Damien Chazelle, la música es de Justin Hurwitz y en el reparto tenemos gente como Miles Teller, J.K. Simmons, Melissa Benoist, Paul Reiser, Austin Stowell y Jayson Blair entre otros. La productora es Sony Pictures Classics / Blumhouse Productions / Bold Films / Exile Entertainment / Right of Way Films.
La película se centra básicamente en la relación del alumno de batería Andrew Neiman (Miles Teller) y su profesor de música Terence Fletcher (J.K. Simmons) gran adelantado en materia de jazz pero que mantiene una rígida disciplina en la escuela de música. La historia empieza cuando Andrew entra a tocar en la orquesta de Fletcher. Lo que parecía un ascenso meteórico resultará un descenso a los infiernos.
Andrew quiere tocar como Buddy Rich gran batería mítico en la escena del jazz. Y para ello se esfuerza hasta llegar al límite de sus fuerzas pues quiere ser un virtuoso y llegar a lo más alto. En ese momento es cuando entra Fletcher que es quien le apretará las tuercas para sacar todo el jugo de su pupilo. El método que usará, cuestionable en sí, saca de él el músico que lleva dentro.
Se menciona también la anécdota que le ocurrió a Charlie Parker con “Papa” Jo Jones el cual este último le lanzó un plato de batería a la cabeza a Parker por tocar mal en un concierto aunque en realidad no fue del todo así. Parker ya era un genio por entonces y no necesitaba que nadie le tirase nada a la cabeza.
Fletcher nos puede recordar mucho al sargento Hartman de la Chaqueta Metallica pues mantiene una rígida disciplina rayando el maltrato a sus discípulos. No sabemos si de verdad busca un genio pero parece que le falta sensibilidad. Si su manera de crear el músico perfecto es esa puede que no lo consiga. Fletcher hace todo lo posible por sacar de sus discípulos lo mejor pero llega a extremos inauditos de violencia verbal y física (muy a la americana como a ellos les gusta). Lo raro es que en su escuela nadie se haya suicidado como pasa en las mejores escuelas.
Es esa violencia física lo más antiartístico del film. Y el sello de Hollywood pues veréis sangre. Para alcanzar el éxito hace falta practicar aunque te rompes el lomo.
Whiplash tiene dosis altas de tensión, violencia verbal y física. Parece que estos también quieren entrar en el cielo a base de patear las puertas del cielo.
Cabe decir que el film tiene un final abierto. Incluso hay giros argumentativos inesperados e inusuales que hacen pensar que Andrew no ha abandonado la música. Como en la vida hay oportunidades que nos hacen encontrar nuestro camino. Le pasa a Andrew sin duda y así lo demuestra en el final abierto de Whiplash. Whiplash nos hace pensar que el método represivo de un profesor que no entiende de arte pero sí de disciplina da como resultado un genio. O quizás no o quizás dé como resultado un músico falto de duende con una gran bolsa de prejuicios a su espalda y que no ha sabido ver que en la música entra todo: la novia, la familia, etc…
Sin duda una película muy polémica que ha dado mucho de que hablar y que ha sido ganadora de muchos premios entre ellos 3 premios Oscar, un Globo de Oro, etcétera.
Os dejo este video para que veais de lo que es capaz un genio de la batería como Buddy Rich.