Suburra | Dirección: Stefano Sollima | Guión: Stefano Sollima, Sandro Petraglia | Música: M83 | Fotografía: Paolo Carnera | Reparto: Pierfrancesco Favino, Elio Germano, Claudio Amendola, Alessandro Borghi, Greta Scarano, Giulia Elettra Gorietti, Antonello Fassari, Jean-Hugues Anglade, Adamo Dionisi, Giacomo Ferrana | Productora: Coproducción Italia-Francia; Catteya, Rai Cinema, La Chauve Souris | Género: Thriller | Duración: 134 min.
Suburra ha contado con un presupuesto de 7 millones de euros y se basa en la novela del mismo nombre de Giancarlo De Cataldo y Carlo Bonini. A su vez se basa en un escándalo cuyos detalles se relevarían en la investigación judicial conocida como Mafia Capitale.
Suburra transcurre en un suburbio de mala fama de Roma. Un ambicioso proyecto inmobiliario en el que están involucrados el Estado italiano, el Vaticano y la mafia. Siete días bastarán para que se convierta todo en una orgía de corrupción y destrucción.
Dirigida por Stefano Solima, director de Roma Criminal y Gomorra. Nos muestra un espectáculo violento y sangriento. Nos sitúa en el contexto político del país para hacernos ver que para llevar a cabo un proyecto inmobiliario es necesario que el aparato de la corrupción empiece a girar.
Suburra cuenta en la coproducción con Netflix. La plataforma anuncia una serie de la misma temática que contará con diez episodios y se estrenará este año. La forma de los corruptos y la corrupción se ha modernizado pero todo lo que ocurre en la historia nos es muy familiar. Altos cargos, políticos corruptos, familias mafiosas de toda la vida y extranjeras, matones con cierta experiencia y los que se creen más listos de la cuenta. Hasta la más alta jerarquía eclesiástica metidos en un huracán de muerte, sangre y sobornos para conseguir sus objetivos.
Suburra está ambientada en noviembre de 2011, fecha que coincide con la dimisión real de Silvio Berlusconi con motivo de la crisis que soportaba el país.
Para convertir la costa de Ostia en un nuevo Las Vegas es necesario la aprobación de una ley que deje que se urbanice el terreno y para eso entra en juego el diputado Perfrancesco Favio. Un personaje adicto al sexo con prostitutas y menores se encarga de que esa ley pueda salir adelante. La sobredosis de una menor cuando estaba en una orgía con él desencadena una sucesión de muertes que unen los destinos de todos los protagonistas.
De la banda sonora se encarga M83. Un sonido electrónico y que es determinante en varias escenas para sentir realmente el momento en el que nos sitúa la historia.
Interpretaciones de lo más convincentes con personajes duros, violentos y situaciones surrealistas que te hacen pensar que no pueden ser posible. Pero reaccionas y ves que no solo nuestro país está lleno de corruptos que se gastan nuestros impuestos en prostitutas, lencería, vino y cocaína. Es una práctica muy extendida pagada con los impuestos de la ciudadanía.
En la historia todos los personajes están interconectados, fluyendo de manera natural todas las relaciones y sin tener que preguntarte en ningún momento ¿por qué está ocurriendo esto? El guión está muy bien pensado para que la historia tenga sentido desde el principio hasta el final.
Sorprende el uso que el poder da a las personas en general y a las mujeres en particular usándolas como un pañuelo de usar y tirar. El desprecio que el poder y el dinero concede a esta gente les hacen creerse los dueños del mundo y por lo general es lo que ocurre. Sus garras son tan fuertes y profundas que llegan a todos los rincones de la sociedad por eso hacen lo que hacen y son tan escurridizos a la hora de atraparlos.
Lo mejor: El retrato de una sociedad perfectamente hilado.
Lo peor: Os encontraréis con mucha violencia.