Título: Blood Father | Año: 2016 | Dirección: Jean – François Richet | Producción: Why Not Productions, Icon Film Distribution.| Guión: Peter Craig, Andrea Berloff.| Música: Sven Faulconer.| Fotografía: Robert Gantz. | Reparto: Mel Gibson, Elisabeth Röhm, Diego Luna, Erin Moriarty, Richard Cabral, Michael Parks | Género: Acción, Thriller | Duración: 88 min
Alcohol, drogas y un puñado de mafiosos que no te pondrán las cosas nada fáciles. Una mezcla explosiva que casi nunca falla cuando se trata de llevar una historia a la gran pantalla. Y si no que se lo pregunten al “renacido” Jean – François Richet (Asalto al Distrito 13, Enemigo Público Nº1) que, tras siete años sin dirigir una película, vuelve a los ruedos cinéfilos de la mano de Blood Father, un thriller que aúna todo lo anteriormente mencionado. Y qué mejor vuelta que acompañado de otro que regresa al rol principal de un film tras un tiempo alejado de papeles protagonistas: Mel Gibson.
La historia se centra en John Link (Gibson), un tatuador ex-convicto con un pasado muy turbio. Tras cumplir su castigo en la cárcel se tendrá que enfrentar a un peligro mucho mayor que volverá a hacer relucir su pasado criminal: un cártel mexicano busca a su propia hija para matarla después de que su novio mintiera y la incriminase de haberles robado dinero. Tras reencontrarse después de años sin verse, John sacará su instinto paternal al extremo mientras son perseguidos por la mafia con el fin de proteger a su hija de cualquier manera posible.
Según comienza a desarrollarse la trama vamos comprobando que las escenas de acción y la relación paterno – filial van intercalándose en la justa medida y que las aventuras, los conflictos y el sentimentalismo (aunque algo característico, todo hay que decirlo) dotan al film de una fuerza y energía que, quizá, es algo impropia para lo esperado y que consigue atraparte desde el minuto uno.
Pero, sin duda, el gran atractivo del thriller es el regreso de Mel Gibsol (Braveheart, Mad Max). Desde Vacaciones en el Infierno (2012) no le habíamos visto en primera plana aunque sí hizo de secundario de lujo en Los Mercenarios 3 y Machete Kills. En Blood Father consigue robarle protagonismo al resto del elenco aunque Erin Moriarty (True Detective, Jessica Jones) y Diego Luna (Frida, Star Wars: Rogue One) saben estar a la altura. Precisamente, ya no es sorpresa encontrarse con el actor mexicano en un film de este tipo ya que, últimamente, parece estar en todas.
El guión está basado en la novela homónima de Peter Craig (quien al mismo tiempo se encarga de poner las líneas a la cinta). A pesar de tener de guionista al mismo escritor, ésta parece ser la parte más floja del film. Por su parte, la banda sonora es apenas perceptible. Aunque, eso sí, rodada en la frontera entre Estados Unidos y México la fotografía es sencillamente espectacular.
En definitiva, si bien es cierto que no se trata de un film sobresaliente, la fórmula de thriller de acción y Mel Gibson no falla y Blood Father consigue atraparte casi desde el primer instante.
Lo mejor: La vuelta de Mel Gibson. Ya era hora de que el actor neoyorkino regresara por los fueros a los que nos tiene acostumbrados. El resto del elenco también sabe interpretar a la perfección el papel que le corresponde estableciendo una óptima e inmejorable empatía con el espectador.
Lo peor: Aunque te mantiene entretenido de principio a fin, la película puede pecar de tener un guión algo plano y con un final predecible.